domingo, 13 de diciembre de 2009

Corazonadas

1195258727_f

Por extraño que pareciese, sonreí. Sonreí al verla tan contenta mirando un horizonte tranquilo de una tarde de verano en una fotografía. Era increíble comprender que algunas personas solo nos traen felicidad, aún a pesar de que nosotros no fuimos ni dimos lo mejor para ellas. Aun así, ese día no comprendí por qué mi corazón sonreía con solo mirar esa foto. Pensé que tal vez era por los recuerdos… pero no, en esa foto no había nada que me trajera recuerdo alguno. Esa foto correspondía a su nueva vida, a la cual yo definitivamente no pertenecía.

Durante varias horas evité hacerle caso a mi inconsciente corazón y le interrumpía cada vez que trataba de decirme que tal vez era “amor”. No sueñes, le respondía en cada oportunidad que tenía para empezar a pronunciar sus diversos discursos sobre el cariño lejano. Yo no quería nada de eso. Yo quería felicidad. “Terriblemente, tu felicidad está lejos y mira un horizonte lejano sonriendo. ¿Y sabes por qué? Porque ese horizonte lejano que mira es una dirección y esa dirección es hacia donde estés.”Luego, mi corazón no me dijo nada más.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Pensamientos Absurdos I

No todos los hombres tenemos una neurona. A algunos - los afortunados - nos basta con la mitad.